LA HERENCIA DE LA PROSTITUCIÓN EN CALCUTA (INDIA)
AMINA CHABEH
Calcuta u oficialmente llamado Kolkata es la capital del estado Bengala Occidental en India. Residen 14,85 millones de habitantes, 100.000 se dedican a la prostitución y el 40% no han llegado ni a su mayoría de edad, siendo casi todas mujeres.
Las mujeres que se dedican a esto suelen cobrar a sus clientes 0.75 euros, 50-100 rupias indias, y su salario oscila entre unos 30-40 euros, 3133,20 rupias indias .
La práctica de la prostitución en la India es ilegal y ejercerla conlleva a las mujeres un aislamiento severo de la sociedad, al igual que las hijas e hijos que conciben y pasan a ser, si no lo eran anteriormente, de la casta de los intocables. ¿Quiénes son y qué significa? Se trata de los miembros más pobres y marginados de la sociedad india, los cuales no forman parte de ningún grupo social y siempre van a formar parte de esta condición ligada a la “prostitución” , dado que la sociedad no las tiene en cuenta y sobreviven en la máxima pobreza económica y la desigualdad social del país.
Las chicas llegan a estos lugares por razones distintas pero con un mismo fin, el de la esclavitud y la prostitución evidentemente forzada. Algunas llegan a Calcuta porqué su marido ha decidido engañarlas diciéndoles que le va a dar una vida mejor en la ciudad, suelen ser chicas que vivían en el campo y cuyas familias nunca vuelven a verlas, otras no llegan engañadas sinó secuestradas por mafias que luego las obligan a prostituirse y, después, están las chicas que han nacido ahí, de las madres que se dedicaron a la prostitución, y ellas, sin palabra, ni voz, seguirán los mismos pasos que la sociedad y las condiciones les fuerzan a seguir indirectamente: ser prostituda en Calcuta.
La situación de algunas madres y padres en estos contextos es el desconocimiento de la situación o la desesperación porque no saben que va a ser de ellos, que comerán, como cuidaran de sus hijos, ... Por otro lado, hay gente que esta clase de vida es su día a día y la tienen más que normalizada y no “aprovecharse” de esta situación, les hace perder dinero.
¿Qué pasa con las menores en estos contextos? La venta de menores está a la orden del día, ya que es un problema periódico y repetitivo. En algunas ocasiones los mismos progenitores son los que venden a sus hijas entre 10.000 o 15.000 rupias, entre 120 y 180 €, que es el precio que se le ponen a las niñas vírgenes.
Por las claras dificultades sociales y económicas anteriormente comentadas surgen unos problemas como la compra y venta de los cuerpos femeninos ,algunos aún menores, como mera mercancía de intercambio y de paso para una sociedad que mientras las utiliza como esclavas sexuales aprovechándose de la situación y las machaca marginándolas por ello.
Las chicas que se dedican a la venta de su cuerpo no suelen usar protección en las relaciones sexuales, ya que la mayoría de los clientes no les gusta usar este método. La temeridad de esta práctica sumada a un gran tabú en la sociedad India, que son las enfermedades de transmisión sexual como la hepatitis y el VIH, conlleva a un problema de seguridad sanitaria y una ineficacia de salubridad en las zonas menos desarrolladas. El desuso del preservativo lleva también a que haya más nacimientos no deseados dentro del barrio donde sus madres junto a miles de otras mujeres se prostituyen de manera forzada por las mafias o por la situación social y económica que las ha llevado ahí.
Estos niños y niñas crecen, viviendo y aprendiendo de estas dinámicas porque les toca sobrevivir, les toca ser aceptados por alguien, pertenecer a algún grupo. Por lo vivido, muchos hacen una mala interpretación, aceptando y normalizando la situación, la que para la mayoría de niñas será, asumir que ése también será su futuro, serán prostituidas antes de la mayoría de edad.
Estas clases de familias multiproblemáticas pueden llevar a que los menores tengan una mala interpretación de la vida y su desarrollo en sociedad claramente quede afectado haciendo que aparezcan tempranos trastornos como el alcoholismo, las conductas delictivas o la toxicomanía.
Las “parejas inestables” hace que los menores no se sientan seguros y algunos pueden hacer una mala comprensión de la clase de relaciones que ven, creyendo que esas son las relaciones sanas y correctas.
La mala economía que hay hace que muchos de estos niños y niñas nunca vayan a la escuela o sean marginados si van por el oficio de sus madres y esto hace que el círculo se cierre creando una cadena interminable de prostitucion hereditaria de madres a hijas.
Y nadie hace nada.
Lo único que nos diferencia de la gente que vive estas experiencias nefastas por las que tiene que pasar por situaciones traumáticas, lo único que tienen de diferencia con nosotros es que ellos estaban en el momento y lugar adecuado para que su vida fuera así, no están ahí por elección propia o por su culpa, podrías ser tú.